
The Handmaiden (La doncella), de Park Chan-wook
Cuando se nombra a Park Chan-wook, es imposible no agradecerle la obra maestra de ‘Oldboy’, que junto a ‘Memories of Murder’ (Bong Joon-ho) y ‘Dos hermanas’ (Kim Jee-woon), hizo que el 2003 fuera el año que gran parte de occidente conoció el cine surcoreano. ¿Pero, era posible igualar o superar aquella obra maestra? En 2016 se estrenó ‘The Handmaiden’, y aunque yo ya me esperaba una gran cinta, nunca hubiera pensado que se convertiría en mi favorita del director, y que pudiera aplicar la frase: “Me he enamorado de esta película”.
The Handmaiden: Una delicia surcoreana
«Corea, década de 1930, durante la ocupación japonesa. Una joven carterista, Sookee, es contratada por un falso Conde para robar la herencia de una rica mujer japonesa, Hideko, que vive en una gran mansión recluida por su tío, Kouzuki. Para ello Sookee se hará pasar por su doncella.»

El director Park Chan-wook (‘JSA’, ‘Sympathy for Mr. Vengeance’, ‘La chica del tambor’) nos trajo esta adaptación de la novela ‘Fingersmith’, de Sarah Waters, donde se mezcla el drama, cine de época, el romance, el erotismo, e incluso el thriller, de una manera increíble, natural, y sin dejar de sorprender.
La novela ya fue adaptada en formato serie en la BBC en 2005 y, al igual que el libro, transcurría en la época victoriana en el Reino Unido. Park Chan-wook no quería repetir época, así que trasladó la historia en plena ocupación japonesa de Corea (1910-1945) y, de esta manera, podría trabajar con un reparto surcoreano.
‘The Handmaiden’ comienza cuando la carterista Sookee (Kim Tae-ri) es contratada para hacerse pasar por doncella en la mansión de Lady Hideko (Kim Min-hee), e intentar convencerla para casarse con el Conde Fujiwara (Ha Jung-woo), que en realidad es un estafador coreano. Lo que Sookee no imaginaba es que se iría enamorando de la inocencia y belleza de Hideko.

La película está dividida en tres partes diferenciadas, cada una de ellas con algo diferente. Este tipo de narración, donde también se incluye flashbacks, cambios de puntos de vista de los personajes, y donde también conoceremos su pasado, funciona perfectamente para incrementar la intriga, el suspense, y añadir muchas sorpresas.
No hablaré mucho de la trama, por si no la habéis visto, pero es una película muy rica en detalles, con unos giros increíbles, y todo bien atado. Enseguida te quedas atrapado en esa red de mentiras, estafas, sexo, amor y soledad.
Park Chan-wook mezcla los géneros y tonos de una manera magnífica, con un ritmo muy adecuado para disfrutar, embobarnos, y saborear cada uno de sus momentos, y también nos deja tiempo para reposar cada uno de ellos. Además, tiene un corte teatral que le añade una riqueza extra a este tipo de historia, y en algunas situaciones.

El vestuario, la puesta en escena, el diseño de producción, y el increíble trabajo del director de fotografía Chung Chung-hoo (‘Oldboy’, ‘New World’, ’Thirst’, ‘It’), multiplican todas las sensaciones que desprende la película, ya sea la sensualidad, el misterio, la alegría, y el romanticismo. Y también en sus momentos algo más turbios.
La película es una historia de intriga llena de preciosismo, erotismo y sensualidad, aunque tiene una parte oscura algo perturbadora. Pero incluso con esto, ‘The Handmaiden’, sigue siendo fascinante de principio a fin. Un placer visual.
También es una delicia para nuestros oídos la maravillosa banda sonora de Jo Yeong-wook, que acompaña a las escenas de una forma magnífica. El tema de “My Tamako, My Sookee” es fascinante.
Una historia de amor, sexo, y deseo
El director Chan-wook ha hecho un gran trabajo dando una perspectiva más femenina en parte de su filmografía, como en ‘Sympathy for Lady Vengeance’, ‘Stoker’, y la serie de ‘La chica del tambor’, y volviendo a contar la guionista Jeong Seo-Kyeong (‘Decision to Leave‘, ‘Thirst‘, ‘Little women‘). Aquí, además, son dos mujeres enamoradas que se enfrentan a ese mundo de hombres que les impide ser totalmente libres.
También hay cierta simbología de la Corea que quiere independizarse de Japón. Park Chan-wook no buscaba precisamente eso con la película, pero es algo surge orgánicamente por la situación, las protagonistas, y el propio marco temporal.

La película es una historia de amor, y también de sexo, que más allá de escenas erótica y preciosas, tiene una gran importancia. El sexo se nos muestra de dos maneras. Hay uno que no se ve ni se practica, sólo se habla de él, o se intuye por los escritos que lee Lady Hideko, y algunos dibujos. Es el más turbio que tiene la película, y da a entender que es repugnante y perturbador.
En cambio, el que podemos ver, es un sexo liberador, donde hay amor y deseo, curiosidad y descubrimiento, y es un lugar seguro e íntimo para ambas protagonistas. Las escenas entre Sookee y Lady Hideko son de una delicadeza exquisita y llenas de erotismo.
The Handmaiden: La dama y la doncella
Como apunte, decir que el título original coreano, ‘Ah-ga-ssi’, significa “La dama”, haciendo referencia a lady Hideko. En su título internacional pasó a ser ‘The handmaiden’, refiriéndose a Sookee. Ese cambio no afecta en nada, porque ambas mujeres, y sus historias, tienen la misma importancia.

En una historia como ésta debíamos creernos a los personajes, que tuvieran una gran química, que simpatizáramos con ellas, pero también que ellos nos repugnaran. Todo el reparto consiguió esto y, sin duda, mucho más. Porque al final te acabas enamorando de ambas protagonistas, y de lo que sienten.
La actriz Kim Tae-ri (‘Mr. Sunshine’, ‘Barrenderos espaciales’, ‘1987: When the Day Comes’) no podía haber tenido un debut cinematográfico mejor. Interpreta a Sookee, una mujer que ha sobrevivido en ese mundo criminal, y que se adapta perfectamente a todo. Pero esa dureza y profesionalidad, se irán rompiendo a medida que se vaya enamorando de Hideko, la necesidad de protegerla y cuidarla, e incluso cuando aparezcan los celos. Sólo puedo decir que Tae-ri está maravillosa.

Kim Min-hee (‘Ahora sí, antes no’, ‘En la playa sola de noche’) interpreta a lady Hideko, una mujer que sólo conoce lo que ha leído, o más bien, lo que le han permitido leer. Ella quiere vivir una vida, pero desde muy joven se la ha controlado. La entrada de Sookee en su vida le ayudará a conocer que hay más allá, tener más confianza en sí misma, y también más fuerza. Todo esto es gracias al amor, algo que nunca le habían dado. La actriz tiene una presencia que nos cautiva tanto como a Sookee. Sus miradas y gestos nos transmiten la inocencia de Hideko, y esa esperanza de salir de esa mansión aterradora.

Los hombres que aparecen en la película son todo lo contrario, egoístas, crueles, sin empatía, y también repugnantes. Por un lado, está el artífice de la estafa, el que se hace llamar Conde Fujiwara. El actor Ha Jung-woo (‘The Chaser’, ‘Along with the Gods’, ‘The Yellow sea’) hace un trabajo magnífico. Nos muestra un hombre que se puede hacer pasar por un noble japonés, seductor y amante del arte, pero que no tiene ningún tipo de escrúpulo para engañar a una pobre inocente, o que no le costaría asesinar a quién le impida enriquecerse. Aunque también es un hombre que se deja llevar por sus deseos algo más carnales. Y eso influirá en su relación profesional con Sookee, por culpa de los celos y sospechas.
Y, por último, el tío de Lady Hideko, Kouzuki. El actor Cho Jin-woong (‘Bestseller’, ‘Assassination’, ‘Signal‘) también está impresionante como este hombre repugnante y perturbado, que sólo ha “cuidado” de su sobrina Hideko para que recite relatos eróticos a hombres de la alta sociedad, y conservar las riquezas que ella heredó. Aunque veamos como la somete o amenaza, el hecho que Hideko sea japonesa y de alta cuna, la ha salvado de más abusos. En el fondo él sabe que es inferior a ella sólo por ser japonesa.

Kouzuki ha renegado de su identidad coreana por completo, para él, “Corea es fea, y Japón es hermosa”. Un pensamiento que tuvieron bastantes coreanos de la alta sociedad durante la ocupación, porque creían que así su status social seguiría siendo alto, ya fuera por puro peloteo, envidia, o ambición. Por eso no desconfía nunca del Conde, para él un noble japonés es alguien de fiar y admirar.
En definitiva, todos los actores y actrices están brutales con todos estos personajes tan diferentes, bien construidos y llenos de vida. Todos tuvieron que interpretar muchas veces en japonés, un idioma que no conocían. Se prepararon a conciencia con profesores particulares. Incluso la actriz Kim Min-hee fue felicitada por su extraordinaria pronunciación.
Conclusión
Afirmo, sin ningún tipo de duda, que ‘The Handmaiden’ es otra obra maestra de Park Chan-wook, que se ha convertido en mi favorita del director. Una película que puedo resumir como extraordinaria, deliciosa, fascinante, seductora y todas las palabras que definan algo parecido. Una historia de amor, suspense, llena de erotismo, muy bien rodada y narrada, y con una puesta en escena y banda sonora extraordinarias. Todo con unas actuaciones sublimes, donde destaco a ambas actrices, que es imposible no enamorarse de ellas. Sólo pondría un pero, y es que todavía no he visto su versión extendida. Por lo demás, una absoluta maravilla.
Si os interesa el tema, aquí os dejo el enlace del especial Cine coreano: La ocupación japonesa de Corea, donde encontraréis más películas que transcurren en esta época tan oscura de la historia de Corea.
Ficha técnica
- Título original: Ah-ga-ssi
- Año: 2016
- Duración: 145 min.
- País: Corea del Sur
- Director: Park Chan-wook
- Guión: Park Chan-wook, Jeong Seo-gyeong (Basado en la novela ‘Fingersmith’, de Sarah Walters)
- Reparto: Kim Tae-ri, Kim Min-hee, Ha Jung-woo, Cho Jin-woong
- Música: Jo Yeong-wook
- Fotografía: Chung Chung-hoon