En los planos secuencia no sólo el actor tiene que estar atento a su frase, también a su actuación, como y donde se mueve, los cámaras, el sonido, los demás técnicos, cables por el suelo que tienen que ir apartándose, decorados, poder prever pequeños errores…, todo esto tiene horas o días de trabajo de planificación y ensayo, y un error, en una toma de 2 minutos (o incluso 45 segundos), puede llevar horas volver a prepararlo todo. Por esa razón…
Las comparaciones siempre son odiosas, pero con una película de culto como es Blade Runner (Ridley Scott, 1982) era normal que ocurriera. En Blade Runner 2049 (Denis Villeneuve, 2017) nos encontramos con una secuela que nos expande el mundo de la película original pero manteniendo su esencia. Blade Runner 2049, 35 años después «Treinta años después de lo ocurrido en la primera película, el joven blade runner K (Ryan Gosling) se topa con un viejo secreto que podría sumir en el caos lo que queda…