
Maligno (‘Malignant’, 2021), de James Wan
El cine de terror está más vivo que nunca. Sea una adaptación (‘Doctor Sueño’), una secuela (‘Un lugar tranquilo 2’), que vaya directo a plataformas (‘Fear Street’, ‘Kingdom: Ashin of the North‘), o su procedencia o presupuesto, nos da igual, el género sigue aguantando, y todavía llegan geniales sorpresas. La última de ellas ha sido ‘Maligno’, de James Wan, que ha dividido bastante opiniones tanto entre el público, como en la crítica especializada. Esto ha sido gracias por la locura que nos presenta, y su riesgo.
Maligno: Terror de los 80, 90, moderno, y de serie B
«Madison está paralizada por visiones de asesinatos espeluznantes, y su tormento empeora cuando descubre que estos sueños de vigilia son, de hecho, realidades aterradoras.»

Después de dirigir sagas y éxitos del terror como las de ‘Insidious’ y ‘El expediente Warren’, e incluso cine de superhéroes con ‘Aquaman’, James Wan vuelve a sus inicios con un cine más visceral como lo fue ‘Saw’, y también más personal como ‘Silencio desde el mal’, y además con a ese aroma a serie B.
James Wan partió de la base de la película ‘Los ojos de Laura’, de Irvin Kershner (y guión de John Carpenter), donde una fotógrafa veía asesinatos a través de su cámara. Pero no sólo de aquí, sino todo este tipo de cine de testigos que veían asesinatos con sus propios ojos a través del propio asesino.
También se nota la influencia del giallo de Mario Bava (‘Bahía de sangre‘, ‘Seis mujeres para el asesino‘) y Dario Argento (‘El pájaro de las plumas de cristal‘, ‘Rojo oscuro‘), algo que más de una vez James Wan ha confesado en las entrevistas, y que se nota que es un cine que le gusta. Ya no sólo tenemos ese asesino de gabardina negra y guantes, si no en bastantes planos, la fotografía, y ese juego de engaños. Que sin duda también beben del cine de Brian De Palma, sobre todo en algunos movimientos de cámara, y otros momentos de su narrativa.

A ‘Maligno’ también se le añade el terror sobrenatural, con algo de body horror cercano a David Cronenberg, e incluso thriller de acción. Sin duda una amalgama de géneros más que curiosa que para mi gusto le ha salido bastante bien. Para lo bueno y para lo malo esto a mucha gente le ha parecido una locura, y algo excesivo.
Toda la atmósfera y estética sirve al momento que estamos viendo. Haciendo que esa mezcla de sub-géneros del terror funcione tan bien. La narración y esos movimientos de cámara girando 360 grados, o ese impresionante plano cenital siguiendo a Madison a través de diferentes habitaciones, me han encantado.

Los efectos prácticos están bastante bien. Cabezas reventadas a golpes, desmembramientos, caras deformes, y algún animatronic. Estos no son tan serie B como parece, yo los vi geniales. En cambio hay efectos digitales que se notan bastante, y son bastante reguleros. Como esos cambios de localización de la protagonista. No sé a qué nivel para la narrativa eran necesarios para hacer esa transición y cambio de escenario.
Grandes momentos, poco misterio
A mí se me pasó volando. Tiene un prólogo genial que sólo te da unas pistas de ese tal Gabriel. Después de una elipsis temporal, nos presentan a Madison, y comienzan las nuevas muertes. Todas estas muertes parecen que están conectadas con Madison de alguna manera, así que tendrá que investigar, junto a su hermana, que le conecta a las víctimas. La policía irá por otro camino e investigación, llegando incluso a sospechar de Madison. Pero ambas líneas de investigación, acabarán uniéndose.

A medida que avanza la trama, nos encontramos con la incógnita de si Gabriel es un demonio, algún tipo de fuerza paranormal, o sólo un amigo imaginario. Un misterio que se intenta alargar, pero que no lo consigue, siendo algo bastante previsible. Aunque a mí eso no hizo que perdiera interés en la película.
Los asesinatos se vuelven más violentos y sangrientos, y la trama y los momentos se vuelven más retorcidos. Ojo a toda la escena de la comisaría. Es cómo si viéramos una película de terror de asesinos en serie mezclado con John Wick. Brutal. ¿Qué es una locura? Sí. ¿Qué mola un huevo? También.

Este párrafo tiene explico un par de cosas que salen a mitad de la película, por si no queréis leerlo, ya que roza el SPOILER. Tiene mucho del cine de terror de hermanos como ‘En nombre de Caín’ o ‘Sisters’ (ambas de Brian De Palma), e incluso ‘La mitad oscura’ de George A. Romero, que adaptaba la novela de Stephen King.
La protagonista, Annabelle Wallis, lleva todo el peso de la película, y cumple bien su papel. Ya se ha movido bastante por el género de terror, como ‘Annabelle’, ‘La Momia’, o la recientemente estrenada en Sitges 2021 ‘Silent Night’. El resto del reparto…, bueno, algunos están correctos, y otros muy reguleros. Quizá las actuaciones son lo más flojo de ‘Maligno’.

Mención especial a la bailaría y actriz Marina Mazepa, que interpreta a la parte física de Gabriel. El prodigio físico para las escenas que hace, la forma de doblarse, y hacer escenas de acción, es impresionante.
Conclusión
‘Maligno’ es un disfrute del género. Tiene momentos brutales, y otros muy locos. Estos últimos son los que harán que te preguntes a ti mismo “¿Qué coño estoy viendo?”, tanto para lo bueno como lo malo. Es tanto cine de terror sobrenatural, como a un thriller de asesinos en serie que recuerda al giallo, e incluso tiene un buen tramo de acción.
Si os gusta el terror de serie B de los 80-90, pero sin que busque esa nostalgia fácil, y también Dario Argento, Mario Bava, David Cronenberg, o Brian De Palma, creo que ‘Maligno’ te hará pasar un gran rato.
Ficha técnica
- Título original: Malignant
- Año: 2021
- Duración: 111 min.
- País: EEUU
- Director: James Wan
- Guión: James Wan, Ingrid Bisu, Akela Cooper.
- Reparto: Annabelle Wallis, George Young, Maddie Hasson, Jake Abel, Jacqueline McKenzei, Marina Mazepa
- Música: Joseph Bishara.
- Fotografía: Michael Burgess
2 comentarios en «Maligno (‘Malignant’, 2021), de James Wan»
Supongo que a los que nos gusta el cine de terror de los 80 y 90 nos encantó esta película. A los que esperaban terror psicológico quizás salieran decepcionados.
Hago especial mención de la versión de los Píxies de su tema «Where is my mind» que potencia algunas escenas (la mayoría rodadas con grandes angulares).
Coincido con la puntuación!
Lo de la música es un buen punto, también. Y es lo que dices, quizá mucha gente esperaba algo más, y se encontraron con algo más gamberro.